En la mañana del 11 de noviembre en la Ciudad de México se proyectó Tolvanera, un documental que narra nuestra resistencia comunitaria frente al despojo de la minera Penmont. A través de los testimonios de ejidatarios, abogados, magistrados, periodistas y activistas ambientales, la tolvanera en torno a nuestra historia se acuerpó.
Además de la proyección, se hizo un conversatorio en donde estuvieron presentes miembros del Comisariado Ejidal,nuestro abogado Sergio García Camacho, Jen Moore investigadora afiliada al proyecto de minería y comercio del Instituto de Estudios Políticos (Washington, D.C.) y el exdirector de la Reserva de la Biosfera El Pinacate y Gran Desierto de Altar Francisco Godinez, quien celebró que próximamente el territorio del ejido El Bajío será certificado como área natural protegida; esta decisión se debe a la biodiversidad única en el planeta que tiene nuestro ejido, en donde habitan especies en peligro de extinción como el berrendo sonorense, “algo así como ‘la vaquita marina’ del desierto”, en sus palabras y como medida de protección ante las amenazas que presentan las industrias mineras a nuestras tierras y nuestras vidas.
El largometraje inicia con las voces de las y los realizadores cinematográficos siendo amenazados por un grupo armado mientras ingresaban a nuestro territorio para investigar más del caso. A lo largo de la película se narran más hechos violentos y agresiones que ocurren contra nuestra comunidad desde que se instaló la minera Penmont.
También se entrevista al exmagistrado Manual Loya Valverde y explica las sentencias que dictó a favor de nuestro ejido, las cuales le imponen a la minera el pago de rentas caídas a nuestra comunidad, restitución del territorio y devolución del oro extraído ilegalmente durante años.
Posterior a la proyección, nuestros compañeros compartieron sus experiencias por el despojo minero y expectativas de justicia para el ejido y tal como lo dijimos en en dicho momento, nuestro principal objetivo es sacar a la minera Penmont de Alberto Baillères, junto con su despojo y destrucción de nuestras tierras.
Los y las ejidatarias del Ejido el Bajío continuaremos alzando nuestra voz sin importar que nos amenacen y nos persigan, no nos detendremos hasta que la minera Penmont acate las sentencias del Poder Judicial y la justicia se haga presente.